Entre nuevos proyectos como el Tren Maya, continuidad de otros como el Tren-México-Toluca y el Tren de Guadalajara, así como la modernización de otros sistemas de transporte, la inversión en trenes para pasajeros suma poco más de un billón de pesos, señaló Iker de Luisa, Director General de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF). 

Se trata de una inversión en que se debe de evaluar el costo-beneficio, sostuvo el representante de la industria ferroviaria mexicana al participar en el Simposio alemán sobre transporte ferroviario.

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En un recuento, refirió que en el Tren maya, la inversión es más o menos de 500,000 millones de pesos (mdp), el Tren México Toluca supera los 100 mil mdp, la renovación de la Línea 1 del Sistema de Transporte Colectivo Metro supera los 41 mil mdp.

A esta inversión se suman los recursos para la Línea 3 del Tren de Guadalajara, de 31 mil millónes de pesos. “Creo que estamos cerca del millón del millón de pesos en proyectos  ferroviarios”, apuntó Iker de Luisa.

De esta inversión se tiene que distinguir que es Capex, o bien gasto en la inversión a largo plazo en activos, y qué es OpEx, es decir, el gasto en las operaciones diarias, detalló.

Proyectos para fomentar el turismo

Al cuestionarle sobre la manera que el sector ferroviario puede fomentar el turismo regiones menos conocidas del país. 

Explicó que en proyectos como el Metrorrey se tienen aforos de entre 500 mil personas diarias, en el Tren Eléctrico de Guadalajara cerca de 300 mil viajeros diarios. En tanto que el Tren Maya puede tener aforos de mil pasajeros por día que podría incrementarse a 12 mil personas por día. 

Se tienen que revisar esas variables, por ejemplo en la Riviera Maya se tienen una oferta de más de 100 mil habitaciones, pero existen otras regiones de la Península de Yucatán, donde se tiene una oferta de 2 mil o 3 mil habitaciones de hotel. 

Con el Tren Maya se justifica llevar ese turismo al otro lado de la Península. “Creo que hay que tener esa visión macro y qué identificar esos costos-beneficio por proyecto” sostuvo el representante de la AMF.

Iker de Luisa insistió que en los proyectos ferroviarios debe identificar, dónde está el costo beneficio, el bienestar social mayor, dónde está esa visión de largo plazo en la infraestructura.

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Ejemplificó que en una ruta de tren de pasajeros México-Acapulco el recorrido podría ser de 400 kilómetros donde el tren si le compite al transporte aéreo y donde se tienen los aforos suficientes para justificarlos. 

Pero hay que “hacer números” y plantear proyectos dónde se tenga ese costo-beneficio directo del proyecto y también los beneficios de regeneración urbana, empleo local.  “Son variables que hay que mirar desde un punto de vista muy cuantitativo” apuntó. 

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