Especialistas y autoridades de movilidad coincidieron en la necesidad de aplicar la Política Nacional de Transporte Público Colectivo Urbano (PNTPCU), para la redistribución de recursos públicos dirigidos a la infraestructura vial, tecnología y renovación de unidades.
Instancias de movilidad publicaron a PNTPCU como instrumento adaptable a las circunstancias de cada entidad para mejorar la manera en la que se traslada la mayoría de las personas en el país.
A través de un comunicado la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM) detalló que el documento reconoce la existencia de diferentes contextos, problemas y niveles de avance en materia de transporte.
Y acepta que no existe una solución única, por lo que es necesario generar acciones diferenciadas por grado de gestión, así como diferentes modelos de operación, con el objetivo de lograr que el servicio de transporte público colectivo se rija bajo los siguientes principios:
- Rectoría del estado.
- Calidad del servicio.
- Equidad e inclusión.
- Justicia social.
- Sostenibilidad financiera.
- Seguridad y cuidado colectivo
- Innovación y tecnología.
La Política Nacional de Transporte Público Colectivo Urbano fue creada por la la Asociación Mexicana de Autoridades de Movilidad (AMAM) en conjunto con WRI y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
El documento es una guía útil para que cada gobierno determine el modelo de gestión más adecuado, con el fin de operar sus servicios de transporte público colectivo en sus centros urbanos y también el nivel de integración de sus sistemas.
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Esto, a través de la modificación de la distribución del gasto público dedicado a la movilidad, ya que en la actualidad más de 70% del presupuesto se dedica a infraestructura vial, que prioriza el traslado en automóvil y no el desarrollo de acciones de movilidad sostenible.
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