Las pequeñas fugas por el llamado “robo hormiga” significan pérdidas económicas, no sólo para los dueños de las flotas, sino para todos los que hacen posible la operación de la empresa.
Las pérdidas por el saqueo en pequeñas cantidades, en diversas áreas de la empresa, pueden representar hasta un 30% de los costos operativos, sin embargo, con una adecuada gestión de las flotas este porcentaje puede disminuir.
Gabriel Pérez y Alfonso Juárez, Directores de AG Solución, compartieron durante el último episodio de nuestro podcast Ruta TyT algunas recomendaciones para detectar más fácilmente el “robo hormiga” y cómo combatirlo.
Explicaron que los robos más frecuentes ocurren en el eslabón más débil es el del consumo de combustible, ya que en ocasiones, los operadores pueden sacarlo de las unidades de la empresa para revenderlo.
”Quizá el dueño de la flota puede pensar que, bueno, son 1000 litros en un viaje y que le falten 20 o 10, pues ‘no pasa nada’, pero si eso lo multiplicamos por todos los viajes que se hacen al mes por todas sus unidades, si hacemos la cuenta al final, pues sí es una cifra significativa”, explicó Alfonso Juárez.
Además del saqueo de diésel, pueden ocurrir desfalcos en la justificación de los pagos por casetas, refacciones, llantas, aceites, aditivos, entre otros.
En ese sentido, los dueños de la desarrolladora de soluciones para la gestión de las flotas comentaron que aunque parece que esos robos pueden ser imposibles debido a la tecnología, siempre existen formas de vulnerar la comprobación de los gastos como con corrupción, por mencionar un ejemplo.
“Una llanta en buen estado la pueden cambiar por un ‘gallito’ y reportan que se tronó en el camino y entonces le autorizan un gallito nuevo, pero él ya se queda con la llanta en buen estado y si eso lo multiplicamos por 18 llantas que trae la unidad, pues se elevan las cuentas”, destacó.
Gabriel Pérez detalló que los robos hormiga no siempre ocurren de la mano de un actor, pues también llegan a involucrarse el personal de seguridad y de contabilidad, aunque también se puede extender hasta el personal de operaciones o del taller.
“Es muy probable que a veces la tecnología falla y no pase el tag cuando se cruza una caseta, para eso, el transportista le da dinero en efectivo y el conductor puede aprovecharse, pero también existen áreas donde la parte que deposita la nómina o que paga a proveedores puede tener un contubernio”, agregó.
Evitar el robo hormiga
Alfonso y Gabriel llevan más de diez años dedicándose al desarrollo de soluciones tecnológicas que ayudan a hacer más eficiente la operación de las flotas, y con dicha experiencia, aseguran que el primer paso que debe dar un transportista para combatir este problema es hacer visibles todos los procesos de la operación por donde circula el dinero.
“Desde nosotros, como fabricantes de soluciones, lo primero que tenemos que entender es la operación completa del transportista, qué hace y cómo lo hace, cuál es tu objetivo final, pues la mayoría lo que necesita es hacer más eficientes sus procesos y detectar dónde está viendo alguna fuga para que se analice y se corrija”, explicó Gabriel.
Por ello, comentaron los directivos de AG Solución, existen sistemas en el mercado que se instalan mediante un software que ayuda a segmentar todos estos procesos y hacer una balanza entre los ingresos y los gastos, de tal manera que, con base en dichos resultados, se puede detectar por dónde provienen la fugas.
Al respecto, ambos aconsejaron a los dueños de flotas contar con tecnología que les ayude a tener una gestión adecuada y balanceada tanto en la operación como en las finanzas.
“Nuestro objetivo es ayudar a las empresas para que lleven una administración ordenada, con los procesos adecuados para que puedan tener un crecimiento y puedan generar más ingresos”, agregó Gabriel Pérez.
Te invitamos a escuchar el último episodio de nuestro Podcast Ruta TyT: