El sector agrícola aporta 63.7% del Producto Interno Bruto (PIB) de las actividades primarias y el 2.1% de la economía nacional, también se trata de un relevante generador de carga; sin embargo, enfrenta múltiples retos y uno de ellos es la falta de transporte seguro y eficiente. 

A raíz de la pandemia incrementaron las compras online y esa fue una oportunidad del crecimiento del transporte nacional, que ha dificultado la movilización de los productos del campo, pues hay una escasez de transporte y de calidad, a eso se suma la inseguridad en las carreteras del país”, comparte Gildardo González, presidente de la Confederación de Productores de Papa de la República Mexicana (Conpapa). 

Así como sucede en las entregas para la industria manufacturera, los productos agrícolas también deben llegar en tiempo y forma a sus destinos, por compromisos comerciales, para garantizar el abasto de la población y por temas de calidad e inocuidad. Aquí es donde un servicio de transporte es clave para que eso suceda. 

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Gildardo González detalla que la producción de papa enfrenta un cuello de botella entre marzo y abril de cada año, ante una “grandísima” necesidad de transporte:

El año pasado no fue la excepción, nos quedamos sin transporte, el producto se queda en el campo, sin poder movilizarlo, hemos tenido una fractura ante la necesidad de continuar con cosechas y poder movilizar el producto”. 

En la zona del Pacífico es donde se vive el mayor dinamismo por la producción de papa en México, con recorridos para abastecer las regiones Norte, Bajío y Centro del país; el rabón y el torton los vehículos más usados para llegar a los centros de distribución, como las centrales de abasto. 

Transporte agrícola, blando de la inseguridad 

Los productos agrícolas al ser la canasta básica y, en muchos casos, al no contar con etiquetas o empaques que los identifique como propiedad de una empresa, son un blanco de la delincuencia, tanto de la que opera en carreteras, como de quienes aprovechan el déficit de transporte para ofrecer sus servicios con engaños, bajo la informalidad y desaparecer la carga en el trayecto. 

El Presidente de Conpapa detalla que el Arco Norte y la periferia de Ecatepec es donde más roban sus productos en tránsito, hay denuncias de las empresas transportistas y también se activa el seguro de la carga. Sin embargo, hay otro tipo de robo que también acecha al sector: 

Hemos detectado en el transporte que son ciertas bandas, ciertas ‘empresas’, que están bien armados entre el operador y el equipo que traen de transporte; cambian de caja, de tracto, hacen sus estrategias y un operador mueve distintas unidades. También hemos detectado que reportan el robo del producto, más no el vehículo”. 

De hecho, Gildardo González advierte de personas o pseudo empresas que se presentan en el campo o centros de producción con vehículos que portan calcomanías de cámaras o asociaciones de transportistas, para ganar credibilidad, pero al final apagan el teléfono y desaparecen con la carga. 

En temporada alta, los productores afiliados a Conpapa reportaron hasta 20 casos de robo; sin embargo, iniciaron medidas internas, como el registro de empresas, placas, modelo y serie de los vehículos y cajas, así como nombre de los conductores, con el objetivo de identificar aquellas ‘empresas’, unidades y personas dedicadas al robo e intercambian esos datos entre productores del Pacífico. 

En temporada teníamos 20 casos de robo y en la pasada llegamos a 13, con medias internas hemos podido bajar la incidencia, más no con la participación de alguna autoridad o base de datos, como Repuve”, expone. 

También el sector agrícola necesita transporte de calidad 

Si bien el sector agrícola está marcado por la estacionalidad, por el tiempo de cosecha y el éxito de la producción, debe existir un transporte capaz de ofrecer el servicio cuando se necesita y asegurar que llegará en las condiciones óptimas y en el tiempo pactado a su destino. Aquí, la comunicación es clave. 

Si un producto perecedero sale el miércoles, con un tiempo de entrega máximo de 48 horas, y si hay un imprevisto como una falla mecánica y el operador no lo comunica, el producto puede empezar a sufrir afectaciones en la calidad, por eso la comunicación es un punto clave de la empresa de transporte”, expone. 

Lo anterior también aplica para los productos no perecederos, como la papa y como en todos los negocios, hay compromisos de entrega que se deben cumplir, porque de lo contrario la imagen del productor se verá dañada. Y sí, el transporte de carga está entre los actores principales para que esas relaciones no se rompan. 

Gildardo González sostiene que el consumo de la población va en aumento y ello finalmente demanda una mayor producción y, por lo tanto, transporte de papa; en cambio, hay retos como el cambio climático y la necesidad de incorporar innovación al campo para hacerlo más eficiente.

Conpapa detectó plagas cuarentenarias en cargamentos de EU y ha solicitado al Gobierno federal intervenga para impedir el ingreso de productos contaminados.

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