Aunque Transportes Wong de la Torre fue fundada en el año 2000, su historia se remonta años atrás, cuando su precursor tenía un negocio de compra y venta de granos, principalmente, en Tamaulipas, con base en Xicoténcatl.
Ese giro le demandaba transporte, que al principio contrataba, pero con los años decidió invertir en sus propios vehículos de carga para solventar sus necesidades todavía a nivel local, y el negocio caminaba bien, sin embargo en el año 1997 este empresario falleció.
Tuvo tres hijos y uno de ellos ya trabajaba con él desde los granos, así que a su muerte, el otro varón se unió y decidieron continuar juntos el legado de su padre mientras la hermana menor continuaba con sus estudios.
Aunque el negocio de los granos seguía dando buenos resultados, de a poco fueron apostando más al transporte, ya no sólo para mover sus propios fletes, sino para ofrecer este servicio a terceros.
Justo para el año 2000 decidieron darle forma y fundaron formalmente Transportes Wong de la Torre, tomando sus apellidos para empezar esta nueva etapa, ahora mucho más enfocada al servicio de fletes.
Tenían dos rabones y dos quinta rueda, pero no eran nuevos, de tal manera que poco a poco tuvieron que irlos rehabilitando para dar un buen servicio, pero sin duda sabían que uno de los principales objetivos era poder renovar la flota paulatinamente.
Mientras uno de ellos se dedicaba de lleno a la parte administrativa, el otro hacía lo propio en la parte operativa, al grado, incluso, de subirse al tractocamión cuando hacían falta operadores.
Apenas dos años después se dieron cuenta de que habían tomado la mejor decisión, pues el negocio de los granos dejó de ser negocio y el transporte seguía con un gran crecimiento, de tal manera que tomaron la decisión de dejar el primero para dedicarse de lleno al segundo.
Un gran acierto que los llevó a consolidar la parte inicial de Transportes Wong de la Torre y, para ese entonces, su hermana también se incorporó: hoy ella es la directora administrativa de la compañía.
Aunque su especialización era el transporte de granos y eso era lo que seguían haciendo en aquellos inicios, poco a poco también fueron diversificando la oferta, a fin de tener más trincheras en las que se pudiera crecer. Y esto también fue un gran acierto.
Lo que antes hacían con jaulas graneleras hoy es una realidad también con caja seca para transportar productos terminados, bebidas, pisos, algunas materias primas, con rutas prácticamente en todo el país.
A decir de Abel Wong, Director General de Transportes Wong de la Torre, el gran éxito de la empresa durante más de dos décadas ha sido la tenacidad con la que se comprometieron para sacarla adelante, ya que al principio no fue fácil conseguir clientes, conservarlos y al mismo tiempo atender los cambios del mercado y del país.
Para esto, dijo, tuvieron que hacer sacrificios importantes, en la familia, en la vida personal y enfocar gran parte de su tiempo en la consolidación de la compañía, y sin duda aquí también el tiempo les dio la razón y el futuro fue justo con ellos-
Hoy, la tercera generación ya está lista para tomar la estafeta, pero de una forma ordenada y orgánica, ya que están conscientes de que el futuro de la empresa está en la profesionalización, a fin de establecer una estructura a prueba del tiempo, siempre a base de trabajo.
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Transportes Wong de la Torre emplea a más de 230 personas y cuenta con una flota vehicular de 130 unidades, y la proyección para este año es crecer al menos con 30 vehículos más, pues también su presencia en los puertos y el empuje del nearshoring sigue permitiendo vislumbrar crecimientos importantes.
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