Un Sistema de Gestión de Transporte (TMS, por sus siglas en inglés) es un componente esencial para la sostenibilidad de la cadena de suministro, asegura Bryant Smith, director de Gestión de Productos de Manhattan Associates.
Smith señala que la sostenibilidad se ha convertido en una prioridad para las empresas, por lo que es indispensable que cuenten con elementos que les permita reducir su huella de carbono y mejorar su rentabilidad.
El experto enlista tres formas en las que un TMS puede ayudar a ello:
- Optimización de rutas y consolidación.
De acuerdo con Bryant Smith, un TMS permite a las empresas el aprovechamiento de la información en tiempo real sobre el clima y el tráfico, por lo que permitirá la optimización de rutas más inteligentes, lo que tiene un efecto significativo en la reducción de emisiones.
Estas soluciones pueden identificar oportunidades de consolidación al combinar envíos, lo que a su vez puede reducir el número de vehículos en circulación», indica.
- Optimización de carga
El director de Gestión de Productos de Manhattan Associates detalla que un espacio vacío no sólo representa un espacio desperdiciado, sino un impacto ambiental negativo.
En tanto un TMS permite a las empresas la implementación de algoritmos más inteligentes, junto con herramientas de construcción de carga unificadas para garantizar una capacidad de carga máxima por envío, reduciendo el número de viajes y las emisiones correspondientes.
Existen nuevas capacidades de construcción de carga que permiten optimizar el espacio del camión. Al reducir el embalaje utilizado en toda la cadena de suministro y minimizar la cantidad de aire transportado, se reduce el volumen por envío, logrando así una mayor eficiencia en el transporte», comenta.
- Identificación de oportunidades de viajes de retorno
De acuerdo con el experto, en conjunto con la implementación de un TMS moderno, existen enfoques clave como la colaboración con corredores de carga para encontrar cargas adicionales, aprovechar las relaciones con los clientes para referencias y nuevos carriles.
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Esto, aunado a fomentar la colaboración con otros transportistas para aumentar la eficiencia operativa, y con ello expandir la red para capturar más oportunidades, lo que se traduciría en la reducción de tarifas de viajes de retorno.
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