Nos encontramos en la antesala del cambio de emisiones exclusivo a Euro VI / EPA 10, una tecnología que requiere, sí o sí, diésel de Ultra Bajo Azufre (UBA o DUBA) para su funcionamiento.
Sin embargo, previamente el Termómetro TyT detectó que el 66.7% de los transportistas no se sienten listos para dar el paso hacia este nuevo estándar de emisiones; además, el 37.6% consideró que la disponibilidad del DUBA es el principal desafío.
En este contexto, este ejercicio de opinión – realizado a través de @revistatyt de X– ahora indagó entre los transportistas sobre los desafíos que enfrentan los transportistas con la llegada de Euro VI / EPA 10 y el combustible que requieren.
Así, un 56.8% de los participantes en el Termómetro TyT señaló que su principal preocupación es que el diésel UBA es insuficiente.
Si bien la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara y sus zonas aledañas, así como la franja fronteriza del norte y corredores establecidos por la NOM-016-CRE, cuentan con este combustible más limpio, el abasto total en el país aún no está garantizado.
Cabe recordar que, si bien Petróleos Mexicanos (PEMEX) ha avanzado en la refinación de este petrolífero, es una realidad que no ha logrado garantizar su disponibilidad en todo el país y, de hecho, tiene una prórroga hasta enero de 2027, para producir, distribuir o comercializar diésel regular en el país.
Pero ésta no es la única incertidumbre que enfrentan los transportistas, pues un 23.3% consideró que la falta de señalética que indique si una estación provee o no este combustible, es el principal reto.
Sobre el tema, voceros de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) han asegurado que el diésel UBA se abastece en diversas estaciones de expendio de hidrocarburos en distintos puntos de la República Mexicana.
Sin embargo, los transportistas requieren que esté indicado claramente este punto.
Leer: Menos emisiones, principal beneficio de tecnologías Euro VI / EPA 10
Finalmente, un 19.9% de los participantes en el Termómetro TyT señaló que el desafío es que ha tenido que recurrir al autoabasto. Esto ha supuesto inversiones, especialmente en infraestructura, y la labor de encontrar un proveedor que cumpla con sus requerimientos.
No obstante, los usuarios de este tipo de esquema han encontrado también otros beneficios como garantizar la calidad del diésel que se suministra a las unidades, cargar litros completos y un precio más competitivo.
Te invitamos a escuchar el nuevo episodio de nuestro podcast Ruta TyT: