María Luisa Fernández Torres es una de las conductoras Scania más jóvenes. A sus 26 años, la originaria de Tepic, Nayarit, ya tiene 18 años viviendo en Tijuana, en donde ha hecho de todo.

Mientras ella se dedicaba al giro de la belleza poniendo uñas, pintando cabellos y actividades similares, su esposo ya se había subido a un camión, incluso ella lo acompañó en algunos viajes y le pareció que era un buen trabajo.

Tiene dos hijas, aún pequeñas. Una de 6 y otra de 2 años, y también ellas fueron una importante motivación para alzar la mano y ser considerada en la convocatoria de Conductas Scania. Y así fue, hoy es de las 11 afortunadas graduadas de la primera generación. 

Desde hace seis años, cuando su esposo se convirtió en operador, ella imaginó que también podría con ese trabajo, además de que, entre ambos, podrían proveer una mejor calidad de vida a su familia. 

En el curso de Conductoras Scania ha hecho nuevas amigas, pero también ha aprendido mucho de lo que no imaginaba sobre un vehículo de transporte, sobre su tecnología y sobre lo mucho que ha cambiado la conducción. 

Ahora está más que lista para salir a carretera, conseguir un trabajo y ponerse a rodar en fletes locales, ahí en Baja California, pues tampoco quiere alejarse mucho tiempo de sus hijas. 

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María Luisa aprovecha este espacio para agradecer a su familia, pues ha sido fundamental para que ella tomara el curso y hoy pueda imaginar un 2023 lleno de retos y oportunidades al volante. 

Por último, señala que le gusta este proyecto realizado por y para mujeres, pues cada vez son más los esfuerzos para derribar paradigmas en torno al género en el autotransporte nacional.