Al estar presente en todo el mundo, DHL tiene que entregar paquetes en los lugares más insólitos o de difícil acceso, lo que implica utilizar medios de entrega igualmente insólitos. Se trata de entregas en condiciones especiales que requiere soluciones creativas y personalizadas.

Ya sea navegando por los estrechos canales de Venecia, Italia, en góndolas, ascendiendo la montaña más alta de Alemania en teleférico o atravesando el extenso delta del Níger en barco, las entregas en diferentes regiones del mundo a menudo requieren nuevas formas de entrega.

Por ejemplo, en la histórica ciudad de Venecia, realizar entregas en coche o bicicleta es prácticamente imposible. En lugar de calles, Venecia cuenta con una red de canales. DHL utiliza esta red para entregar paquetes en la ciudad italiana mediante góndolas.

Aunque las góndolas son ligeramente más anchas que las esbeltas embarcaciones que se utilizan para transportar turistas por los canales, son parte integral del tráfico fluvial del Gran Canal. DHL también cuenta con una góndola de reparto en solo otra ciudad del mundo: los canales Grachten de Ámsterdam.

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Teleféricos, barcos y raquetas de nieve

El Grupo DHL opera la oficina de correos más alta de Alemania, en el Zugspitze, en los Alpes, a una altitud de unos 2,600 metros. Ahí, el cartero Andreas Oberauer entrega cartas y paquetes a diario en uno de los lugares más remotos del país y vacía el buzón en la meseta montañosa mediante teleférico. Ya sea con sol o con tormenta, lleva el correo de forma fiable a través del Zugspitzbahn hasta los restaurantes y el mirador. «La impresionante vista lo compensa todo, incluso con tormentas ocasionales», afirma Oberauer.

En otro ejemplo, para las entregas en Lagos, Nigeria, ciudad de África occidental, DHL utiliza dos barcos. Operan diariamente entre la parte continental de Lagos y el distrito sur de la Isla Victoria. Cruzar el río toma solo unos 18 minutos. En contraste, el viaje por carretera puede durar hasta tres horas debido al tráfico denso y al mal estado de las carreteras.

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Igualmente particular es la entrega que hace DHL en lugares invernales. Con aproximadamente 50 cm de largo y 20 cm de ancho, las raquetas de nieve que usan los repartidores en las regiones noruegas con fuertes nevadas les ayudan a llegar a sus clientes. Este calzado especializado se utiliza en zonas remotas a las que no se puede acceder con vehículos de reparto regulares. Se fija con correas de velcro. Su superficie plana y amplia estabiliza la postura y evita que se hundan en la nieve.

Otro ejemplo de entrega personalizada se da en Berlín, Alemania, donde el personal de reparto de DHL también actúa como capitán de un barco solar en el río Spree. «Nuestros clientes se divirtieron mucho cuando empecé a cruzar el río», dijo el capitán Dirk Braumann. «¡Todos son amables y nunca había visto caer un paquete al agua!» Como el barco funciona con energía solar, no solo es práctico sino también respetuoso con el medio ambiente: un ejemplo del compromiso de DHL con la logística sostenible e innovadora.

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