En vísperas de la COP28, la Unión Internacional del Transporte por Carretera (IRU) y la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF) se comprometieron a seguir impulsando una transición justa en el autotransporte.

Las dos organizaciones, que representan a más de 3.5 millones de operadores de transporte por carretera y 18.5 millones de trabajadores del transporte, respectivamente, acordaron ocho acciones específicas para mejorar la accesibilidad y el atractivo de la profesión. Entre estas medidas se encuentran:

  • Incorporar a los trabajadores y sus sindicatos en la toma de decisiones sobre la transición justa.
  • Asumir la responsabilidad de las normas laborales y la reducción de emisiones en toda la cadena de suministro.
  • Adaptar la regulación para seguir el ritmo de las nuevas tecnologías de descarbonización.
  • El secretario general de la IRU, Umberto de Pretto, dijo que la industria está comprometida a lograr la neutralidad de carbono para 2050, sin dejar de brindar grandes oportunidades profesionales a los jóvenes y satisfacer eficazmente la demanda de servicios de transporte por carretera.

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«Los operadores y trabajadores del transporte son codiseñadores de soluciones pragmáticas«, dijo de Pretto. «La formación, la capacitación y el reciclaje profesional desempeñarán un papel crucial en la transición justa».

Mientras tanto, el secretario general de la ITF, Stephen Cotton, afirmó que los trabajadores del transporte de todo el mundo están pidiendo a los gobiernos que aumenten sus ambiciones en materia de transporte sostenible.

«Este compromiso representa nuestro reconocimiento conjunto de que una transición justa en el sector del transporte por carretera requiere que los trabajadores y sus sindicatos estén en el centro de la toma de decisiones», dijo Cotton.

Cotton dijo que el 80% de las personas en todo el mundo quiere una mayor inversión en transporte sostenible y pidió a los gobiernos que pasen de las palabras a la acción y se comprometan a un diálogo social constructivo con las empresas de transporte y los sindicatos en todos los niveles para impulsar la acción y una transición justa para la fuerza laboral de este sector.

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El compromiso de la IRU y la ITF es un paso importante hacia una transición justa en el transporte por carretera. Las dos organizaciones representan a una amplia gama de intereses en el sector, y su colaboración es fundamental para garantizar que la transición se realice de manera inclusiva y equitativa.

La organización ha destacado en reiteradas ocasiones que la inclusión de los trabajadores y sus sindicatos en la toma de decisiones es esencial para garantizar que sus necesidades y prioridades se tengan en cuenta; y que la responsabilidad de las normas laborales y la reducción de emisiones en toda la cadena de suministro es importante para garantizar que la transición no se produzca a expensas del capital humano.

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