La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA, por sus siglas en inglés) informó que Martin Lundstedt, presidente y director ejecutivo de Volvo Group, fue reelegido como presidente de la Junta de Vehículos Comerciales de dicho organismo para un segundo mandato de un año.
La decisión se tomó al interior la Junta de Vehículos Comerciales de ACEA, conformada por los CEO de DAF Trucks, Daimler Truck, Ford Trucks, Iveco Group, MAN Truck & Bus, Scania, Volkswagen Commercial Vehicles y Volvo Group.
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Tras su ratificación al frente de esta responsabilidad, Lundstedt expresó que 2023 será un año como ningún otro para establecer la futura hoja de ruta de la industria europea de camiones. «Para los fabricantes de camiones está muy claro, nuestro enfoque total está en la descarbonización del transporte por carretera, absolutamente todo debería respaldar este esfuerzo», detalló.
En espera de que la Comisión Europea revise el reglamento de CO2 para vehículos pesados este año, el directivo expresó que los responsables políticos deben tener en cuenta que la descarbonización del transporte por carretera requiere del compromiso de todos los actores involucrados.
“Todo avanzará más rápido conforme se den las condiciones óptimas en infraestructura de carga, reabastecimiento de combustible y la paridad de costos”, precisó Lundstedt.
El presidente y director ejecutivo de Volvo Group expresó su preocupación tras la reciente propuesta de Euro VII sobre emisiones contaminantes, pues conlleva el riesgo de ralentizar la transición a la neutralidad climática.
De hecho, para cumplir con Euro VII, dijo, los fabricantes de camiones y su cadena de suministro más amplia tendrían que trasladar recursos financieros y de ingeniería sustanciales de las tecnologías eléctricas de baterías y pilas de combustible al motor de combustión interna.
«Estudios recientes, que tienen en cuenta nuestras ambiciosas trayectorias de descarbonización, han demostrado que el Euro VII solo proporcionará beneficios adicionales muy marginales a la calidad del aire, que fácilmente se verá eclipsada por ambiciones de renovación de flota aún ligeramente más altas», argumentó Lundstedt.
Recientemente, ACEA pidió a la Comisión que alineará la regulación Euro VII y los objetivos de emisión de CO2, para que la industria pueda racionalizar los desarrollos en una sola vía estratégica, en lugar de múltiples vías de desarrollo.
