El Gobierno del Estado de México, en coordinación con autoridades federales, realiza una dura estrategia de combate al robo de carga; sin embargo, los delincuentes están incrementando sus acciones delictivas en zonas limítrofes con Hidalgo, es aquí donde crece un punto rojo. 

Análisis de la empresa Overhaul muestran que el norte del Estado de México concentró 68.3% del total de los casos de robo a transportistas o robo de carga en la entidad, durante el primer semestre del año, porque existe un fuerte desplazamiento hacia Hidalgo de la mercancía robada. 

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El efecto cucaracha entre el Estado de México e Hidalgo 

“Lo que se observa entre el Estado de México e Hidalgo es un desplazamiento del delito, que se da en dos condiciones: espacio y tiempo”, explica en entrevista para TyT Luis Enrique Villatoro Martínez, director de seguridad e inteligencia de la Cadena de Suministro de Overhaul. 

“En el Estado de México hay una estrategia unificada entre Guardia Nacional y la Policía Estatal, más la Fiscalía especializada para combatir el robo al transporte, que está logrando penalidades y hasta 70 años (de cárcel)”. 

Entonces, cuando se logran penas de hasta 70 años, esas personas obviamente están fuera de la acción, lo que está sucediendo es un desplazamiento del delito en términos de criminología ambiental y esto está afectando al vecino más cercano que es Hidalgo sobre la México 57, pero el evento también se está moviendo hacia Querétaro”. 

Enrique Villatoro, director de seguridad e inteligencia de la Cadena de Suministro de Overhaul.

Ante el panorama, Villaltoro Martínez aborda un punto clave: la necesidad de crear una estrategia regional que involucre al Estado de México y entidades vecinas, donde evidentemente deberá estar la entidad gobernada por el morenista Julio Menchaca. 

«Debería de existir una estrategia regional donde se está interactuando las policías estatales y las policías municipales. Un ejemplo característico es el caso de la Ciudad de México, que tiene el programa Escudo Urbano, donde hay una fuerte comunicación entre la Policía de la Ciudad de México y del Estado de México», evalúa.

De hecho, añade que entre más cercanas son las zonas de riesgo, el comportamiento de los delincuentes en el robo de carga tiende a ser muy similar en cuanto horarios, los días e incluso los modos de operación tienden a ser muy violentos. Esto es lo que sucede entre el Estado de México e Hidalgo.

Puntos críticos por el robo de carga

Fernanda Gabutti, gerente de Inteligencia para Latinoamérica en la empresa de gestión de riesgos, comparte en entrevista que el mayor peligro por robo de carga se concentra en la Carretera Federal 57D, conocida como la 57, y la 85D, con su conexión hacia Pachuca, Hidalgo.

Los tramos carreteros que conectan con Hidalgo son los puntos más críticos para los transportistas, Overhaul detectó que el tramo de Ecatepec a Temascalapa, que abarca los kilómetros del 19 al 45 de la autopista México 85D y que es la conexión del Estado de México hacia Pachuca, concentra 19% del delito de la entidad mexiquense. 

En la Carretera 57D, Overhaul detectó mayor riesgo en la conexión que va de Tepotzotlán a Polotitlán, prácticamente la entrada a Querétaro, hacia donde también se moviliza la carga robada. 

Sin embargo, separa la vía en tres tramos, donde el rastro de la delincuencia evidencia su desplazamiento hacia Hidalgo. El primer punto crítico es el trayecto de Huehueteca, con los límites del estado de Hidalgo, en los kilómetros 43 al 60, con 11% de la actividad delictiva. 

Tenemos otra conexión de diferentes carreteras, que sería la Tula- Jorobas y la incorporación hacia el Circuito Exterior Mexiquense, a la altura de la caseta de Jorobas. Entonces ese nodo de intersección de varias carreteras también facilita la comisión de la actividad delictiva, que facilita se puedan mover las mercancías robadas”. 

Fernanda Gabutti, gerente de Inteligencia para Latinoamérica en Overhaul

Otras rutas de escape para el robo de carga

La especialista refiere otras vías de escape. Una de ellas es el tramo de Soyaniquilpan hacia Jilotepec, del kilómetro 84 al 120, y destaca la intercepción de una carretera federal con La 57 y el Arco Norte. 

Otro tramo, va del kilómetro 60 al kilómetro 84, que prácticamente es el municipio de Tepeji del Río, tan sólo para Hidalgo representa 21% del total de robo de carga en Hidalgo. La carretera 57 y su conexión con Querétaro es el punto más crítico para este estado. 

Entre enero y mayo, en el Estado de México fueron registrados 1,705 casos de robo de carga a transportistas, 7.8% menos respecto a igual lapso de 2023, según datos de la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).

Mientras que en Hidalgo el registro fue de 192 delitos, 34.5% menos en su comparación anual. Sin embargo, Overhaul alista un reporte donde incrementó 76% en la entidad hidalguense, entre enero y junio de este 2024.

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