A medida que aumenta la presión sobre las empresas de bienes de consumo de alta rotación (Fast Moving Consumer Goods, FMCG) para descarbonizar sus cadenas de suministro, surgen opciones para ayudar en ese objetivo, tal es el caso de lo que está haciendo Maersk.
La empresa de logística integrada dio a conocer tres acciones que está desarrollando para hacer más eficientes las cadenas de suministro terrestres de FMCG para, así ayudar a sus clientes a descarbonizar la logística terrestre.
Maersk reconoció que el problema está aumentando a pesar de que los vehículos actuales son más eficientes energéticamente; sin embargo, las emisiones de CO2 del transporte de mercancías por carretera han aumentado más de 20% desde 1995.
La firma señaló que 19 países de la UE han aplicado un impuesto sobre el carbono a los combustibles fósiles y parece probable que sigan más regulaciones. Advirtió que las empresas de bienes de consumo rápido necesitan eliminar el carbono de sus operaciones lo más pronto posible.
Maersk aseguró que aquellas empresas que tengan una ventaja inicial, encontrarán que la transición es más fácil y menos disruptiva para las ganancias y el crecimiento.
Las tres acciones en las que Maersk está trabajando son: flexibilidad y velocidad, un nuevo ecosistema y combustibles limpios.
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Flexibilidad y velocidad
La flexibilidad y la velocidad de Maersk Inland ayudan a las empresas de bienes de consumo masivo a impulsar la eficiencia en todas sus cadenas de suministro, ayudando a la descarbonización sin sacrificar la disponibilidad del producto.
Al usar Maersk Inland, puede moverse sin problemas entre trenes, barcazas y camiones, a través de un único punto de contacto, optimizando la eficiencia energética de su cadena de suministro.
Sin mencionar que esta flexibilidad brinda a las empresas de FMCG la capacidad de burlar las interrupciones. La reciente inversión de Maersk en una línea ferroviaria electrificada entre Valencia y Londres, por ejemplo, ha ayudado a aliviar los cuellos de botella de la cadena de suministro y ha reducido la huella de carbono de los productos que venden sus clientes en España.
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Un nuevo ecosistema
Maersk consideró que se requiere un ecosistema de nuevas tecnologías y nuevos procesos para impulsar la descarbonización. Es por eso que está construyendo uno.
Para 2050, la mitad de las reducciones de CO2 del mundo provendrán de tecnologías que actualmente se encuentran en la fase de demostración o prototipo. Las innovaciones recientes de Maersk incluyen:
- Prueba piloto de biocombustibles alternativos y electrificación en camiones pesados, como los 300 camiones eléctricos que han agregado a su red en América del Norte.
- Un almacén de logística verde en Dinamarca, que es el primero de su tipo en emitir cero emisiones directas de las operaciones.
- Un piloto en Japón para usar biodiésel renovable para el transporte de contenedores, con el objetivo de reducir las emisiones de carbono hasta en un 80 por ciento.
Combustible limpio
Como tercer punto, Maersk ubica al combustible limpio, que considera la «piedra angular de la descarbonización». Pero aunque su uso está cobrando impulso, todavía existe el desafío de escalar el suministro para satisfacer las demandas globales.
Para superar esto, se necesita un gran esfuerzo y colaboración en toda la cadena de valor. Sin embargo, la compañía ha logrado un progreso significativo en el mar. La inversión en un buque alimentador neutral para el clima que utiliza metanol completamente verde comenzará a operar este año.
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